
En Pekín no son tan populares como por el sur, imagino que especialmente por el clima frío del invierno, pero también existen. Los habituales son cerrados y grises. En algunas zonas hay abiertos, con una pequeña lona roja recubriéndolos y que en lugar de llevar motor funcionan como bicicletas, por lo que suelen ser utilizados para pasear a turistas por hutones.
El precio del trayecto hay que negociarlo antes de montarse y habitualmente salen más caros que coger un taxi, pero cuando no hay otra opción (no pasan taxis, cae el diluvio o nieva) o apetece jugarse un poco la vida en el trafico pequinés por carriles de coches, bicis y peatones, son útiles.
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